Consumo navideño: el comercio se aferra a las promociones y cuotas para cerrar un año complejo
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El sector comercial encara el último mes del 2025 con una mezcla de cautela y esperanza, apostando todas sus fichas a la temporada navideña para intentar revertir —o al menos mitigar— la caída de ventas acumulada durante un año marcado por la recesión económica. Las cámaras empresarias y los dueños de locales proyectan un diciembre con mayor movimiento que en meses anteriores, impulsado por el cobro del aguinaldo y la necesidad social de celebración, aunque son realistas respecto al poder adquisitivo de los clientes: se espera un consumo medido, inteligente y muy enfocado en la búsqueda de oportunidades de precio.
Para traccionar la demanda en este escenario austero, la estrategia central se basará en una agresiva política de promociones y, fundamentalmente, en el regreso de las cuotas sin interés. Los comercios, en alianza con bancos y billeteras virtuales, ofrecerán planes de financiación a largo plazo y descuentos significativos por pago en efectivo para tentar a los compradores. El objetivo es facilitar el acceso a regalos y productos de la mesa navideña, sabiendo que el financiamiento es la herramienta clave para que las familias se animen a gastar más allá de sus ingresos corrientes.
Los rubros que encabezan las expectativas son Indumentaria, Juguetería y Tecnología, aunque se prevé que el ticket promedio sea más ajustado que en temporadas históricas. Los comerciantes advierten que, en muchos casos, sacrificarán márgenes de rentabilidad absorbiendo parte del costo financiero de las ofertas, priorizando la rotación de mercadería y el flujo de caja para cerrar el balance anual con números un poco más alentadores. La premisa para este diciembre es clara: volumen sobre margen, aprovechando el "efecto Fiestas" para dar un respiro a la facturación.
