Gonzalo Piovi vivió una noche para el olvido en el marco de la Copa Intercontinental. El defensor argentino, pieza titular en la estructura del Cruz Azul de México, cometió un error no forzado que resultó determinante para el resultado final del encuentro contra el poderoso Flamengo de Brasil. La jugada fatal ocurrió en el segundo tiempo, en un momento crítico del partido donde el trámite era sumamente parejo y ambos equipos buscaban con cautela el pase a la siguiente instancia del certamen internacional.
La acción desgraciada se produjo cuando Piovi intentó salir jugando desde el fondo bajo presión. En una maniobra arriesgada, el ex Racing calculó mal un pase hacia el centro del área (o perdió el control del balón ante la marca rival), dejando la pelota prácticamente servida para que el delantero del "Mengão" definiera con total libertad ante la desesperada salida del arquero. El estadio quedó en silencio ante el "blooper" defensivo que rompió el cero en el marcador, asestando un golpe anímico letal del cual el conjunto mexicano no logró recuperarse en los minutos restantes.

Tras el pitazo final, la imagen de la frustración del zaguero recorrió el mundo, mientras las redes sociales se llenaban de críticas por la oportunidad desperdiciada en una cita de tal magnitud. Esta derrota por la mínima diferencia significa la despedida del Cruz Azul de la competición, dejando a Piovi en el centro de la escena por una desatención puntual que opacó el esfuerzo colectivo y le entregó la clasificación en bandeja al gigante brasileño.